A continuación se presentan ingredientes comunes que se encuentran en rellenos, coberturas, coberturas de chocolate y muchos otros productos de chocolate, junto con información sobre cómo se pueden cultivar y procesar de manera sostenible.

Aceite de palma: La certificación RSPO (Mesa Redonda sobre Aceite de Palma Sostenible) es el estándar de la industria. Los principios y criterios de certificación son complicados debido a que el aceite de palma se utiliza en muchos países diferentes, cada uno con sus propias leyes. En términos generales, la certificación RSPO requiere que el aceite de palma provenga de proveedores legales que empleen prácticas sostenibles: "La producción sostenible de aceite de palma está compuesta por una gestión y operaciones legales, económicamente viables, ambientalmente apropiadas y socialmente beneficiosas" (sitio web de RSPO).

Aceite de coco: La sostenibilidad es una idea relativamente nueva en el proceso de adquisición y fabricación del coco. A diferencia de muchos otros ingredientes comunes, no existen pautas establecidas para garantizar la sostenibilidad. Nuestras marcas asociadas trabajan con agricultores y procesadores en una cadena de suministro rastreable para garantizar la protección de los agricultores y el medio ambiente. Puedes obtener más información sobre nuestros estándares para el coco sostenible aquí.

Aceite de soja y lecitina de soja: A partir de 2020, la mayor parte de la soja mundial se produce en Brasil. En 2017 se lanzó el Manifiesto del Cerrado, que pedía una acción inmediata para proteger esta región de Brasil de una mayor deforestación causada por la producción agrícola. 23 marcas globales, incluida Barry-Callebaut, firmaron la Declaración de Apoyo (SoS) a los objetivos del Manifiesto del Cerrado. Nuestras marcas asociadas obtienen soja que cumple con las pautas del Manifiesto y también obtienen soja aprobada por la Fundación Proterra.

Azúcar de remolacha: si bien muchos podrían pensar primero en la caña de azúcar cuando piensan en fuentes de azúcar, la remolacha es en realidad responsable de la mayor parte del azúcar que se utiliza en el mundo. Como ocurre con cualquier cultivo que se cultiva y procesa a gran escala, el azúcar de remolacha requiere un abastecimiento y una regulación cuidadosos para garantizar la preservación de la tierra y el bienestar de los agricultores y productores. La Iniciativa de Agricultura Sostenible (SAI) establece estándares estrictos para la producción y adquisición sostenible de azúcar de remolacha.

Azúcar de caña: en Estados Unidos y Asia, la caña de azúcar es la fuente preferida de azúcar. El azúcar de caña presenta desafíos de sostenibilidad similares a los del azúcar de remolacha, con el nivel adicional de cultivo y producción en áreas tropicales. Nuestros socios recurren a Bonsucro en busca de estándares sostenibles para el azúcar de caña.

Productos lácteos: garantizar el bienestar animal y al mismo tiempo actuar como administradores de la tierra y de los agricultores son las claves para la adquisición sostenible de productos lácteos. Barry-Callebaut estableció la Carta Visiondairy, que se centra en los resultados de los agricultores para promover la sostenibilidad, permitiendo a los agricultores y compradores adaptarse e innovar basándose en las mejores prácticas.

Cacao: todas nuestras marcas asociadas son parte de la Fundación Cocoa Horizons, que promueve y apoya el crecimiento y la producción sostenibles de productos de cacao. A través de la agricultura empresarial sostenible, la educación y el apoyo comunitario, Cocoa Horizons trabaja para mejorar los medios de vida de los agricultores y proteger el medio ambiente.

Vainilla: en comparación con otros ingredientes, la vainilla constituye un porcentaje minúsculo de cualquier producto determinado, pero aparece en muchos productos, y obtener vainilla sostenible es clave para alcanzar los objetivos de producción responsable. La naturaleza meticulosa del proceso de cultivo de la vainilla, junto con la delicadeza de las plantas y las áreas en las que crece, presentan desafíos similares a los que se enfrentan con el cacao. A pesar de la popularidad de la vainilla, no se ha establecido una estructura global de directrices y certificación. El propio programa de Barry-Callebaut para garantizar la sostenibilidad de la vainilla es auditado y verificado por EcoCert, un proveedor externo.